Esta nueva tecnología presenta desafíos para quienes tienen que crearlo y encontrar sus mejores funcionalidades.
Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), para 2030 1.1 billón de puestos de trabajo podrían verse radicalmente transformados por la tecnología. Y esto tendrá un impacto directo sobre el tipo de habilidades que los talentos deberán tener para poder afrontar estos cambios.
Y hay que estar preparados, porque lejos de lo que se cree, la transformación digital y la irrupción de las nuevas tecnologías están llevando al aumento neto en la cantidad de empleados disponibles.
Los últimos datos de la Encuesta de Expectativas de Empleo de ManpowerGroup revelan que más de la mitad de los empresarios (58%) prevén que la tecnología inmersiva les llevará a contratar más personal.
No obstante, se están reformulando los tipos de puestos de trabajo que se están creando y las competencias que necesitarán estos nuevos colaboradores.
Las nuevas tecnologías pueden eliminar determinados puestos de trabajo, pero también crean innumerables oportunidades. Los trabajos que requieren creatividad, pensamiento crítico, resolución de problemas complejos, habilidades interpersonales e inteligencia emocional tienen menos probabilidades de ser automatizados.
Nuevas oportunidades
Como hemos visto en el pasado, los avances tecnológicos conducen a la aparición de industrias y sectores laborales. Estas tecnologías también requieren que los empleados tengan un conjunto de habilidades para poder aprovechar al máximo sus capacidades.
Según el estudio Cómo la Inteligencia Artificial y la Realidad Virtual (RV) transformarán el mundo laboral, de Experis, marca enfocada en la atracción y gestión de talento tecnológico de ManpowerGroup, “la tecnología inmersiva, la IA y la RV están transformando los tipos de habilidades que los empleados necesitan para hacer bien su trabajo, pero la mano de obra actual está muy poco preparada para ello”.
En un mundo laboral atravesado cada vez más por la tecnología, puede resultar difícil para los colaboradores mantenerse por delante de la curva de competencias. Así lo indica una encuesta reciente, en la que se señala que el 63% de los consultados no tenían experiencia en el uso del metaverso en un contexto profesional.
En respuesta a esto, el 27% de los encuestados aseguró que es muy probable que se capacite en esta tecnología, mientras que tan solo el 10% dijo que sería improbable.
La investigación antes mencionada demuestra que existe “un verdadero interés por la formación inmersiva: el 55% de los encuestados afirmaron que sería muy probable o ligeramente probable que aceptaran oportunidades de formación si se impartieran en el metaverso, frente a solo un 4% que afirmó que sería muy improbable”.
Las nuevas tecnologías y los métodos de capacitación están mejorando la forma en que los empleadores pueden entrenar a sus equipos. “Esto es fundamental si las fuerzas laborales quieren estar preparadas para la manera en que las tecnologías innovadoras están revolucionando la esencia misma del trabajo”, dice el estudio.
Para concluir, el informe de Experis asegura que “con la ayuda de la RV, los empleadores pueden preparar a sus trabajadores a gran velocidad y escala, creando talento altamente calificado en la que se dedica más tiempo a trabajos de mayor valor”.